Capítulo 2 Argumentos Documentales.
Habiendo ya transcurrido doscientos veinte años del vil asesinato de Antonio José de Sucre, hijo de Cumaná; es justo anteponer el esclarecimiento del lugar de su Casa Natal ante la magna Conmemoración de los 500 años de la Ciudad.
Cumaná ya era pueblo de abundantísimo poblamiento, antes de la llegada de los extranjeros, aquí estaban los antepasados con sus vivencias cotidianas; pero fueron los antepasados foráneos de hace media centuria, los que sobre este territorio edificaron una ciudad a la usanza de ellos. Una estructura, que exige del hombre: normas, protocolos y conductas que lo hacen ciudadano y lo sujeta a la tierra, a la familia y también al hogar; a su morada. Pero, la ciudad retribuye tal dedicación y sacrificio, con amplios dotes de cooperación, seguridad y mutualidad antes las inclemencias naturales y humanas. Es sobre ese último de los patrimoniales sociales – el matrimonio que nos une con la tierra, con el hogar y sitio de nuestro nacimiento – que versa este esfuerzo por ennoblecer la memoria del Gran Mariscal de Ayacucho. Otros ciudadanos lo han intentado con dedicación y nobles esfuerzos, pero la sapiencia del pueblo que todo lo juzga y comenta, no perfectamente claro con los argumentos y alegatos esgrimidos, han dado al trasto con las diligencias por ubicar el lugar de la Casa Natal de AJS; en complacencia con el mutismo de las autoridades, que pocos esfuerzos dedicaron a tan importante misión.
El cumanés don Pedro Elías Marcano 1 , nacido el 5 de diciembre de 1855, ha sido el más dedicado y afortunado de los que nos preceden en la búsqueda del lugar de la Casa Natal de AJS. Fue uno de los informantes al respecto de las diligencias y consultas que adelantó y concretó el gobierno del Presidente del Estado Sucre, General Eliseo Sarmiento en 1913. Diligencias que fueron coordinadas y ejecutadas en la mayoría de los casos por el Secretario General de Gobierno, su amigo el señor Miguel Ramos; así se desprende de un manuscrito argumentativo que trataremos más adelante.